Hoy te traigo un post relleno de fragancias, untuosas texturas y caricias reparadoras, dedicado a una pequeña tienda de cosmética ecológica llamada Árnica Montana, que se encuentra muy cerca de mi casa, en la esquina de la calle Navas con Mallorca. Ya lo sabes: si está en el blog es porque se trata de una tiendas de mis preferidas, y yo soy de las que pensamos lo bueno hay que compartirlo.
No sólo de cosmética vive Árnica
La foto de arriba sólo es una pequeña muestra de lo que ofrece. En Árnica Montana conseguirás todo lo que necesitas para tu cuidado personal y con sello ecológico certificado en casi todos los casos: productos básicos de higiene natural, cremas hidratantes –desde las más generales hasta las más específicas–, maquillaje, cepillos, productos de higiene íntima –desde geles hasta copas menstruales y compresas reutilizables,, tintes para el cabello y hennas, inciensos, velas y paro de contar porque parece que no acabo. También encontrarás complementos nutricionales y algunos productos básicos de alimentación ecológica (sector en crecimiento en la tienda) para que aproveches al máximo la visita.
Sin embargo, sobre todas estas cosas, lo importante es que en Árnica Montana te recibirá Beatriz, que amablemente utilizará todos sus conocimientos en la materia de cuidados naturales para conseguir el producto perfecto para ti.
También Online
Árnica Montana también dispone de una tienda online en la que podrás conseguir todos sus productos sin necesidad de ir hasta la tienda.
La historia detrás de Árnica Montana
Beatriz, propietaria y anfitriona de este rincón, era cliente habitual de herbolarios y consumidora de productos naturales y ecológicos. Le gustaba mucho ese mundo y, sobre todo, le gustaba cuidarse. Su tienda preferida era Manantial de Salud, un local de referencia en Barcelona. Fue ahí donde probó soluciones y mejunjes variados cuando su pequeño, que ahora ya tiene 8 años, comenzó a sufrir de piel atópica. Como nos ha pasado a muchos con la maternidad, su salto de lleno a lo ecológico tuvo mucho que ver con la necesidad de proteger a su bebé. Le picó la curiosidad, y empezó a leer las etiquetas con más detenimiento y a observar la diferencia entre el uso de uno u otro producto. Aprovechaba todas las charlas que organizaba Manantial de Salud y pronto le hizo falta saber más. Comenzó a hacer cursos: herbodietética, estética natural, oligoelementos, aromaterapia… Se le ofreció la oportunidad de formar parte del equipo de la tienda y no la dejó pasar. Y después de sumar tres años de experiencia, se sintió con las herramientas suficientes y se lanzó a la aventura de emprender su propio camino.
Los inicios, como en todos los emprendimientos, fueron duros. Además, estamos hablando del año 2010. En plena la crisis. Sin embargo, Árnica Montana poco a poco ha ido haciéndose un espacio en la cosmética ecológica y hoy su líder está muy satisfecha del camino andando. Y yo creo que tiene sobradas razones y por eso le he dedicado este post. Una tienda 100% ecocosmopolita.
Las coordenadas de Árnica Montana, Barcelona
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08027 Barcelona.
Porque hay muchas cosas maravillosas
en este mundo
y a mí me encanta compartirlas
Cada 15 días escribo una carta en la que comparto un popurrí de cosas que creo que deberías conocer, porque son buenas para la Tierra o porque son buenas para ti.
Recibe las cartas de la ecocosmopolitaQue un poco, es lo mismo porque formamos parte de este planeta.
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y a mí me encanta compartirlas.
Cada 15 días escribo una carta en la que comparto 3 cosas buenas y bonitas, que creo que deberías conocer ya sea porque son buenas para la Tierra o porque son buenas para ti.
Que un poco, es lo mismo, porque somos una misma cosa.